ATENTANDO EN RECOLETA

Juicio por el atentado de CFK: Carrizo pidió perdón y Brenda Uliarte no declaró

El acusado de liderar la llamada Banda de los Copitos que atentó contra la exvicepresidenta repasaba su historia personal cuando rompió en llanto, algo que volvió a suceder varias veces durante su exposición. En tanto Brenda Uliarte, acusó "sentirse mal" y no declaró.

La segunda jornada del juicio por el atentado a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner se lleva a cabo este miércoles desde las 9:30 en Tribunales con la declaración de uno de los tres detenidos, Nicolás Carrizo, acusado de liderar la llamada Banda de los copitos. En medio de su exposición, rompió en llanto luego de recordar aspectos de su historia personal. "No recibí ni una ayuda", relató, entre lágrimas.

El imputado comenzó repasando su historia personal, atravesada por la muerte de su padre y la enfermedad de su hermano, de quien debió hacerse cargo, lo que, según explicó, afectó su estado de ánimo y le trajo numerosos problemas. "Cuando muera una persona todos te vamos a ayudar, decían todos", contó, "pero yo no recibí ni una ayuda". Luego, se quebró, y la declaración debió suspenderse momentáneamente para permitirle recuperarse.

Más tarde, dio detalles sobre cómo conoció a Fernando Sabag Montiel y Brenda Uliarte. Volvió a romper en llanto cuando repasó su detención y nuevamente cuando habló de que los mensajes acerca de matar a la entonces vicepresidenta "eran un chiste".

En tanto, la otra acusada, Brenda Uliarte, pasó antes al estrado para hacerlo, pero luego adujo que se sentía mal y finalmente no declaró.

En la primera jornada, uno de los procesados, Fernando Sabag Montiel, acusado de ser el autor material del intento de magnicidio, llamó la atención de los fotógrafos y les mostró un cartel con un mensaje: "Me tienen secuestrado".

Montiel está acusado del delito de “homicidio doblemente calificado por alevosía y el concurso premeditado de dos o más personas, agravado por el uso de arma de fuego” en grado de autor; a Uliarte se encuentra imputada por el mismo delito, aunque como coautora. Mientras que a Carrizo se lo acusan de ser partícipe secundario en el intento de magnicidio contra Cristina Kirchner.

Durante todo el proceso, el Poder Judicial autorizó a que solo se puedan tomar imágenes dentro de la sala en la primera jornada y por única vez. De esta manera, Sabag Montiel, vestido de jean, campera rompevientos color bordó y zapatillas blancas y negras, llamó la atención de los fotógrafos y les mostró una hoja de un cuaderno, donde escribió: "Me tienen secuestrado".

En la primera jornada del juico, la expresidenta compartió una publicación en su cuenta de X (antes Twitter) donde asegura que "salvo honrosas excepciones, el silenciamiento mediático y la dirigencia y de la dirigencia política, resulta igualito al de jueces y fiscales que tienen la responsabilidad y obligación de investigarlo".

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