JUSTICIA

Larreta respaldó a D’alessandro: “¿Por qué tendría que renunciar?”

El jefe de Gobierno porteño minimizó el contenido de los chats filtrados del ministro de Seguridad en uso de licencia y volvió a justificar que las conversaciones fueron obtenidas a partir del “espionaje ilegal”.


Ni el inicio de la campaña de su precandidatura presidencial hizo cambiar de parecer al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, quien, una vez más, defendió al ministro de Seguridad en uso de licencia, Marcelo D’alessandro, al minimizar el contenido de los chats filtrados y al afirmar que se tratan de conversaciones obtenidas a partir del “espionaje ilegal”.

El encargado del ejecutivo porteño respaldó a su funcionario y se preguntó “¿Por qué tendría que renunciar?". Consultado por el escándalo que atraviesa al GCBA y la relación con el poder judicial, continuó: "Son chats espiados, acá hay espionaje ilegal. A un ministro le chuparon el teléfono y sacaron a la luz sus chats privados”.

En ese sentido, Rodríguez Larreta remarcó que se tratan de “chats con su familia, intimidades personales”, mientras explicó que “se está investigando para ver quien hizo espionaje ilegal en un ministro".

"Salió un informe que aclara que los chats pueden ser adulterados o cambiados. Además, dice que son obtenidos ilegalmente, no pueden usarse como prueba. Ahora se le hace juicio político a la Corte en base a chats que fueron pinchados y espiados", expresó el alcalde de la Ciudad de Buenos Aires.

Para concluir, en diálogo con Radio Mitre, también se refirió al juicio político que impulsa el oficialismo contra los representantes de la Corte Suprema de Justicia: “Lo vamos a frenar, tenemos los diputados. Por una cautelar, que no es ni un fallo de fondo, les hacen juicio a todos los miembros. Es un atropello a las instituciones".

Cabe recordar que días atrás se dieron a conocer nuevos intercambios del ministro D’alessandro en los que se evidencia la relación que mantenía con el juez federal Sebastián Ramos, quien previamente fuera el encargado de archivar la causa que tenía abierta el funcionario porteño por sus chats con Silvio Robles, secretario del juez Rosatti.

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