Jonathan Thea: “El proyecto del PRO en la ciudad llegó a un límite”

El pasado 17 de agosto Jonathan Thea se convirtió en el nuevo Secretario General del Movimiento Evita en la Ciudad de Buenos Aires. Actualmente Thea es Director General de Coordinación Institucional en Jefatura de Gabinete de Ministros de la Nación, pero cuenta con una larga trayectoria militante en la política porteña.

En 2006 fundó el Frente Cultural Raymundo Gleyzer, lo que en 2014 derivó en la creación de Seamos Libres. El lunes pasado, esta organización se integró definitivamente al Movimiento Evita a través de un Congreso Nacional que se realizó de manera remota. Thea se define como parte de una generación que por mucho tiempo se consideró crítica de las estructuras tradicionales, pero hoy resalta la importancia de lograr mayores procesos de unidad, de construir organizaciones cada día más fuertes.

Si bien considera que en la Ciudad de Buenos Aires hay quienes no creen posible ganarle a Horacio Rodriguez Larreta, Thea se ubica entre los que creen que sí es posible hacerlo. Sostiene que el Frente de Todos tiene “una posibilidad histórica” de traducir lo logrado a nivel nacional en este distrito, ya que el proyecto del PRO en la Ciudad llegó a un límite.

¿Crees que el 10 de diciembre de 2019 arrancó una nueva etapa política en Argentina?

En principio nosotros logramos construir algo que no se venía pudiendo hacer, por lo menos en los últimos 10 años, que es la unidad de todo nuestro espacio político. Y cuando hablo de unidad no me refiero solo a Cristina, a Alberto, y a Sergio Massa. Me refiero a que logramos construir una unidad muchísimo más grande, que excede a las estructuras partidarias.

Integramos a los colectivos feministas, que en su mayoría están nucleados en el Frente de Todos. Las CGT, las CTA, los gobernadores, sectores de la producción. Logramos construir un frente muy fuerte y heterogéneo. Eso es una novedad para nosotros. Además, eso no refiere solo a la inteligencia electoral y a ganar las elecciones, tiene que ver con haber logrado un espacio político muy potente.

¿Y cómo ves a la oposición, concretamente, a Juntos por el Cambio?

Así como para nosotros la heterogeneidad puede ser una fortaleza, creo que la heterogeneidad de ellos también fue y es una fortaleza. Que haya moderados, que haya radicalizados, que haya alguno tirándose más al centro, otro más a la derecha, eso hace que sean una coalición potente electoralmente. Sin embargo, nada indica que se vayan a romper.

Te partís cuando crees que no podés disputar electoralmente. Por lo cual, yo veo que a pesar de sus matices, van a seguir juntos, van a ser competitivos el año que viene y van a ser competitivos en 2023. Al mismo tiempo, creo que nosotros tenemos que tenerle respeto a esa coalición porque tiene dirigentes con buena aceptación en un sector importante de la sociedad.

¿Por qué se integraron al Movimiento Evita?

El acercamiento con el Movimiento Evita viene desde el 2014. Hace años que nos venimos vinculando con ellos, con sus posicionamientos políticos, con la CTEP. Durante 12 años estuvo parado en un mismo lugar, estuvo en la calle combatiendo al gobierno de Macri, y en el 2019 fue parte de la coalición de gobierno que ganó las elecciones. El Movimiento Evita estuvo siempre donde tenía que estar. Sin embargo, estar siempre en el lugar necesario, nunca le impidió tener planteos propios, y nunca fueron dañinos con la estrategia general. Eso es audacia política. El hecho de tener iniciativa política y nunca perder el protagonismo, por supuesto que te expone a equivocaciones, pero eso le pasa a cualquier fuerza que pretenda mantenerse con nuevas demandas.

Luego de acumular varias derrotas en la Ciudad ¿cuáles considerás que son los desafíos del Frente de Todos en el distrito?

En la Ciudad creo que hubo distintas construcciones electorales que nos permitieron sumar, a veces más a veces menos, caudal electoral a la estrategia nacional. Por eso creo que la Ciudad fue vista, desde que llegó el PRO, como un lugar al cual aportar más votos a lo nacional o en función sumar representatividad en la Legislatura. En este sentido, creo que no tuvimos la capacidad de construir una estrategia política que perdure en el tiempo y se sostenga para disputar la Ciudad de Buenos Aires.

Creo que cambiamos muchas veces de candidato, de prioridades, de planteos, y por momentos fuimos muy ambivalentes. Es necesario construir equipos que piensen y proyecten qué tipo de Ciudad queremos, con qué actores sociales, y para quiénes la queremos construir. Hay que tener un diálogo con los diferentes actores políticos del distrito y acomodar esto. Si no hay planificación es muy difícil llevar adelante una disputa electoral real.

¿Qué pensás de los que creen que es imposible gobernar la Ciudad de Buenos Aires?

Hay quienes piensan que ganar la Ciudad es imposible, y eso es un error. Yo soy de los que cree que es posible, o que por lo menos hay que hacer el intento, nuevamente. Creo que nuestro mayor aporte al Gobierno nacional tiene que ser disputar la conducción de Ciudad de Buenos Aires.

¿Considerás que en este contexto hay condiciones singulares que permiten disputar la ciudad de Buenos Aires?

Tenemos una oportunidad histórica porque somos parte del Gobierno que logró que la Argentina no entre en una crisis sanitaria y económica con miles y miles de muertos. Somos parte del proyecto político que logró sentar a los 24 gobernadores y consensuar una política común. Sin ir más lejos, el que garantizó que en el área metropolitana no haya una crisis terrible se llama Alberto Fernández, y es nuestro Presidente. Tenemos que tener la capacidad de traducir eso en la Ciudad de Buenos Aires. Hay muy buenos candidatos y candidatas, y tenemos grandes consensos dentro del Frente de Todos. Larreta no va a poder reelegir, y creo que el Pro va llegando a un límite como proyecto de Ciudad.

Lo que el PRO, hoy Juntos por el Cambio no hizo hasta acá, no lo va a hacer. Hay condiciones, y de seguro que hay que intentarlo, y nuestro aporte desde el Movimiento Evita en la Ciudad de Buenos Aires va a ser que lo intentemos. No lo digamos para la tribuna, trabajemos con ese objetivo. Esa es nuestra responsabilidad, ese es nuestro deber. Trabajaremos efectivamente para ganar la Ciudad.