“No íbamos a permitir que bajaran colchones”, dijo el Gobierno de la Ciudad tras la represión

El Gobierno de la Ciudad justificó el operativo represivo desatado ayer en el Obelisco, en el marco de una jornada de protesta de los movimientos sociales y para visibilizar el drama de la gente en situación de calle. Los detenidos son dos personas sin techo que habían ido a pedir comida, pero el Ejecutivo porteño los tildó de “delincuentes”.

"Lamentablemente volvimos a caer en aquellos que creen que la política se hace con violencia, agresión; acá se fue a buscar el conflicto, fueron a agredir a la policía. Les habíamos dicho que no había problemas en manifestarse, pero que no íbamos a permitir que bajaran colchones”, dijo el secretario de Seguridad, Marcelo D'alessandro. Y agregó, en diálogo con radio La Red: “Tenemos cinco policías heridos, y uno con tres fracturas en el brazo. Los detenidos no son meros referentes sociales, fueron a agredir, son delincuentes".

Integrantes de diferentes organizaciones sociales encolumnadas en la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (Ctep), de Juan Grabois, se concentraron en el Obelisco para realizar ollas populares, con el lema fue "La calle no es lugar para vivir". El objetivo era realizar un almuerzo y merienda para las personas en situación de calle, e instalar además una carpa con capacidad para 80 personas. La Policía de la Ciudad sostuvo que no contaban con el permiso correspondiente.

"(Grabois) Pretendía armar una carpa en la Plaza de la República, quisieron bajar colchones, empezaron a agredir a la policía, a tirar piedras. Lo invito a Grabois que vaya al Churruca para ver al oficial con el brazo roto en tres pedazos. El problema es cuando se pretende realizar actividades políticas creyendo que la manera es la violencia", remarcó D'alessandro.

Pese a las declaraciones del funcionario sobre los “delincuentes” detenidos, el Ministerio Público de la Defensa de la Ciudad informó que las dos personas detenidas están en situación de calle efectiva y se habían acercado a pedir comida a las organizaciones que participaban de la movilización.