El sugestivo twitt de Graciela Camaño sobre Macri y Néstor Otero, titular de la concesión de Retiro

El juez federal Claudio Bonadio ordenó en la mañana de este martes la detención del dueño de la terminal de ómnibus de Retiro, Néstor Otero, como parte de la causa de los cuadernos de Centeno. En este marco, un sugestivo twitt de la jefa de la bancada del Frente Renovador, Graciela Camaño, llamó la atención. “Mauricio Macri y ahora??? Mirá si se arrepiente y cuenta todo?????”, escribió la diputada en sus redes sociales, junto a una nota sobre el tema y arrobando al Presidente. 



Otero es dueño de TEBA S.A., la compañía que lleva la concesión de la Terminal de Ómnibus de Retiro desde 1993 y que se encarga de la administración, el mantenimiento y la limpieza del edificio y espacios externos del lugar, además de la seguridad. Sus vínculos con los negocios siempre fueron amplios. Conocido como "el hombre de las terminales", montó en los últimos 20 años un imperio en torno a las concesiones de las estaciones de ómnibus de, por ejemplo, La Plata, Liniers y Mar del Plata y de la estación ferroviaria de Once.

Cuando Macri era jefe de Gobierno, varias agencias de la Ciudad pusieron el ojo sobre varios de sus negocios en Retiro y Once. Por entonces, la explotación de las terminales era jurisdicción nacional y tiempo después, se probó que para mantener la concesión de Retiro, Ricardo Jaime mantuvo durante años un departamento en Avenida del Libertador cuyo alquiler pagaba Otero. 

El tiempo pasó, y cuando Macri asumió en la presidencia no hubo demasiados embates de parte de Cambiemos a los negocios del empresario, al punto de que hasta el día de hoy mantiene las concesiones en Retiro y Once. De hecho, no hace tanto el empresario y el gobierno porteño de Horacio Rodríguez Larreta  se asociaron para la construcción de una terminal en el sur de la ciudad: la Estación Dellepiane. La construcción en Villa Soldati tuvo el objetivo de descomprimir el tránsito colapsado en Retiro, costó US$ 30 millones de dólares y la inauguración contó con la presencia de las más altas autoridades. No obstante, hace un tiempo que está lista, pero no tiene micros y su futuro es incierto.



Otero empezó sus negocios con una pizzería en la zona Sur del Gran Buenos Aires. Hace muchos años, estuvo en la concesión del Zoológico de Buenos Aires de la mano de Gerardo Sofovich, donde manejó los locales de comida en el parque. Además, administró uno de los pabellones de Ciudad Universitaria. En 1997, se hizo del Haras Dilú. Empezó como un campo de 200 hectáreas ubicado en Melchor Romero (La Plata). Luego compró 1350 hectáreas en Tornquist. Después sumaron 139 hectáreas en Pigüé y arrendó de 870 hectáreas más en Bartolomé Bavio (Magdalena), en donde hay 868 cabezas de ganado bovino y cultivos de maíz y girasol.