- Política
- 07.04.2018
TENSIÓN EN BRASIL
Se entregó Lula: "Voy a probar mi inocencia"
El exPresidente de Brasil anticipó hoy temprano que se iba a entregar a la Policía Federal y aseguró que saldrá fortalecido de esta acusación porque probará su inocencia.
Casi 24 horas después de que venciera el plazo, Luiz Inácio Lula Da Silva se entregó a la Policía Federal de Brasil. Será trasladado al aeropuerto de San Pablo para, luego, llevarlo a Curitiba, donde permanecerá detenido acusado de haber recibido un departamento lujoso en concepto de soborno, en el marco de la causa Lava Jato.
En la Superintendencia de la Policía Federal, en el barrio de Santa Cándida de Curitiba, ya se congregó un grupo de personas para expresarle su apoyo a Lula cuando llegue a la Ciudad en un avión de la Policía Federal. Allí, el expresidente de Brasil será alojado en una celda ubicada en el cuarto piso del edificio, de 15 metros cuadrados, con cama simple, una mesa y un baño privado. El lugar no tiene rejas ya que era usado por oficiales de la Policía, así que la custodia estará las 24 horas.
La detención de Lula llega después de que la Corte Suprema de Brasil votara, por 6 a 5, en contra del habeas corpus presentado por su defensa para que el exmandatario permanezca en libertad hasta agotar todas las instancias judiciales. Ayer, el juez Sergio Moro, emitió la orden de detención y le dio hasta las 17 del viernes para entregarse. Cumplido el plazo, Lula permaneció en el sindicato metalúrgico de San Pablo, donde pasó la noche acompañado de una multitud en las calles. Hoy temprano encabezó una misa en honor a su esposa fallecida y, por la tarde, se entregó a la Policía.
Al finalizar la ceremonia religiosa, el expresidente dio un discurso al pueblo presente en las calles y desafió al juez Sergio Moro "y a los jueces del TRF4 a un debate en una Universidad. Que muestren las pruebas y digan qué crimen cometí" y agregó que (R)"si el crimen que cometí era traer comida y educación a los pobres, quiero seguir siendo un criminal en este país".(R)
Da Silva apuntó directamente al Poder Judicial de Brasil, cuyos jueces describió como "mentirosos" y no les concedió su perdón. "No puedo perdonarlos, mintiendo, habíendole dado a la sociedad la idea de que soy un ladrón. Sin pruebas, sólo con convicción. Creo en la Justicia y no estoy por encima de la ley, pero creo en la verdadera Justicia, basada en los registros del proceso. No puedo admitir mentiras y un PowerPoint como justicia. Un juez, a diferencia de nosotros, necesita tener una cabeza fría, responsabilidad cuando se trata de juicio".
Por eso, les exigió "que demuestren cualquier crimen que he cometido" y sostuvo que el sueño de esos poderes es que él no sea candidato, y la otra aspiración que tienen "es una foto de mi prisión". "Ellos lo quieren y yo voy a tomar su orden. Pero quiero hacer una transferencia de responsabilidad: ellos piensan que su problema es sólo Lula. Van a descubrir que el problema son todos ustedes. Mis ideas ya están flotando en el aire y no tienen manera de arrestarlos".
Además, el candidato presidencial aseguró que va a salir de esta situación "más grande, más fuerte, más veraz e inocente porque voy a probar mi inocencia".
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