La Ciudad toma control del juego y monitoreará los casinos y las loterías

El Gobierno porteño recibiría alrededor de 1.800 millones de pesos anuales luego de que el sábado próximo quedará oficializado el traspaso del juego a la Ciudad, cuyo control hasta ahora ejercía el Gobierno nacional.

Según indica la ley, el 70% tendrá que destinarse al Instituto de Vivienda de la Ciudad (IVC), y el resto, a distintas áreas relacionadas con lo social, como salud y educación, entre otras. Además, se sumarían otros 900 millones para afrontar los gastos operativos que generan el juego y del organismo de control.

Para fiscalizar todo el dinero que se genera en torno al juego, ayer el Gobierno porteño inauguró un centro de monitoreo y control que fusiona el software que se utiliza en otras ciudades del mundo y el que desarrollaron técnicos locales.

De esta manera, la Ciudad tendrá plena competencia en materia de regulación y control de los juegos de azar: las 4.500 maquinas tragamonedas ubicadas en el Hipódromo de Palermo, otras 1.500 en el Casino de Puerto Madero y 130 mesas de paño, además de las 1.270 agencias de lotería.

En junio del año pasado, el Gobierno nacional publicó en el Boletín Oficial el traspaso en el manejo de bingos y casinos. Ayer, Larreta confirmó que no habrá mas bingos y tampoco se aumentará la cantidad de maquinitas en territorio porteño.

La sociedad que administra el hipódromo -HAPSA, de Federico de Achával- tiene una concesión vigente hasta 2032, en tanto en el casino vence en 2019. Durante 2016, Cristóbal López vendió su parte en ambas salas a Ricardo Benedicto, quien es socio histórico del empresario kirchnerista.