Sala: "Me quise matar porque estoy podrida de que me llenen de causas"

Milagro Sala, quien lleva más de un año detenida en la prisión de Alto Comedero, en Jujuy, señaló que el gobernador "Gerardo Morales me quiere muerta". La dirigente de la organización barrial Tupac Amaru denunció que recibió amenazas dentro del penal y le dijeron que "si no me mataban afuera, me iban a matar acá adentro". La diputada del Parlasur había intentado clavarse una tijera en su abdomen el jueves de la semana pasada, luego de que la Justicia le notificara tres nuevas causas.

En declaraciones a Radio Rebelde, Sala aclaró que "me puntié el estómago con una tijera, estoy podrida que me llenen de causas y que nadie haga algo. Estoy bastante triste porque esto es de nunca terminar". En este marco, resaltó que "me quise matar con un cuchillo y después con una tijera porque estoy cansada de que inventen cosas" y le pidió "perdón a los argentinos por mi arrebatamiento de querer matarme". 

El Gobierno jujeño había desmentido que la líder de la Tupac Amaru haya intentado suicidarse y, mediante un comunicado oficial, aseguró que se trató de una jugada para victimizar a la dirigente social. Estas desmentidas se sumaron a las del servicio penitenciario, sin embargo, Sala denunció que "algunas celadoras están metiendo púa para que nos peleemos" entre las internas pero aclaró que lo ocurrido no se debió a una pelea por el liderazgo dentro del penal.

Además, la diputada del Parlasur señaló que desde el Gobierno de Gerardo Morales, "todo lo que no pueden destruir, lo mandan a tomar y a robar. Desarmaron todos los centros de salud, las piletas, todo" lo que impulsó la Tupac Amaru en la provincia y agregó que "lo hiciereon con 150 ex militares para que destruyan a la Tupac". Ademaś, Sala señaló que "en Jujuy no hay oposición y saben que la única oposición soy yo" y por eso continúa detenida.

En cuanto al accionar de la Justicia, Milagro Sala indicó que la Corte Suprema tiene "que trabajar para que ya no hayan presos políticos" y resaltó que está presa "por el capricho de un tipo que tiene un odio visceral hacia las organizaciones sociales".