¿Larreta en el centro de la relación entre la Argentina y Trump?

Horacio Rodríguez Larreta se transformó en un actor imprescindible de la relación entre Estados Unidos y la Argentina. Durante una charla con Mauricio Macri, el magnate habría pedido acelerar el papeleo para la construcción de una torre de 35 pisos en pleno centro porteño. La conversación se volvió un tema para la prensa internacional y son varios los medios que se hicieron eco de una situación que fácilmente podrían encuadrarse como tráfico de influencias.

Desde la Ciudad dijeron desconocer el proyecto de Trump y aseguraron que lo poco que saben "es lo que se estuvo diciendo en las últimas dos semanas" en los medios de comunicación. Además pusieron en duda que el permiso de construcción para el emprendimiento haya estado presente en la conversación con Macri. "Si hay algo que Trump no come es vidrio. Es imposible que haya planteado algo así en una conversación protocolar", agregaron.
 
El domingo pasado, en el programa Periodismo para Todos, de Jorge Lanata, se indicó que durante la charla “Trump le pidió que autorizaran un edificio que él está construyendo en Buenos Aires”.
 
La versión fue rechazada por uno de los voceros del Jefe de Estado norteamericano, Jason Miller, quien dijo que “no es cierto” que los dirigentes hayan hablado de ese tema. Lo mismo aseguró uno de los protagonistas del incidente, Felipe Yaryura, el socio argentino de Trump que sostuvo que la construcción de la torre no fue parte de las conversaciones. Yaryura fue señalado por medios internacionales y locales como quien habría gestionado el llamado de Mauricio Macri y Donald Trump a través de su hijo Eric, luego de que la Cancillería fracasara en el intento.
 
Tres días después del llamado, Yaryura aseguró al diario La Nación que sólo faltaban detalles administrativos para que arranque la obra y que se encuentran a la espera de la autorización del Gobierno de la Ciudad, que encabeza Horacio Rodríguez Larreta, para comenzar la construcción.
 
El escándalo creció en los Estados Unidos, donde el ex vocero de Seguridad Nacional de Barack Obama, Tommy Vietor, utilizó las redes sociales para llamar al caso “un acto de corrupción política” y reclamó que el Congreso de ese país apruebe “leyes de ética” para evitar ese tipo de negociaciones.
 
Al mismo tiempo, la Embajada argentina en Washington debió emitir un comunicado en la que indicó que “ese tema no fue parte de la conversación entre el presidente Mauricio Macri y el presidente electo Donald Trump” ya que el tema del que ambos líderes hablaron fue “la relación institucional” entre ambos países.
 
Pero aún así, en las redes sociales el debate continuaba. Es que en 2012 se conoció que TrumpCo and el YY Development Group de Argentina se habían asociado para construir una “Torre Trump” en Uruguay, tal como relató Susan Simpson.
 
También surgió el proyecto de realizar un rascacielos en Argentina, pero el proyecto permanecía trabado.
 
La noche de la elección, los socios de YY Development, Moisés Yellati y Felipe Yaryura se mostraron en las redes sociales en el bunker de Trump junto al hijo del mandatario.
 
Y a nadie le pasó desapercibido que la llamada entre Macri y Trump fue negociada - porque así lo dio a conocer oficialmente el Gobierno - durante una conversación entre Eric Trump y la canciller Susana Malcorra. Lo que se sospecha es que ese contacto lo negoció el argentino Yayura. Y luego se produjo la tan ansiada comunicación por parte del Gobierno entre Macri y Trump.
 
Debe recordarse que el Ejecutivo quedó descolocado luego de la victoria del magnate republicano, ya que había apostado todas sus fichas a la demócrata Hillary Clinton. Y hubo varios días de desconcierto en la Cancillería, período en el que incluso se publicaron notas con trascendidos de que en el Palacio San Martín estaban “buscando los teléfonos” de allegados a Trump para contactarse con el ganador.
 
Las especulaciones continúan ya que hasta el momento el Gobierno porteño no dio a conocer información de que la construcción de la torre esté autorizada porque debería intervenir la Legislatura porteña.
 
De hecho el propio Trump advirtió en las últimas horas a través de Twitter: “Antes de mi elección se sabía muy bien que tengo intereses en propiedades en todo el mundo. Sólo los medios corruptos hacen de esto un tema de debate!”