Detectan a autores de amenazas de bomba en colegios porteños

Las amenazas de bomba en colegios pueden llegar a darse dos o tres veces por día a través del 911 e incluso en el mismo establecimiento. Sólo este año, según estimaciones oficiales, ya hubo 125 llamados. Y si bien luego se comprueba que son falsas alarmas, los reiterados casos pusieron en alerta a las autoridades.

Por un lado a las del Ministerio de Educación, por la cantidad de días perdidos de clase. Y por el otro, a las de Seguridad y Justicia. Tras las denuncias judiciales, se conocieron dos casos en los que se descubrió a los autores. “Se dio con los responsables de las llamadas extorsivas a los que se los encontró culpables de intimidación pública, un delito incluido en el Código Penal que prevé penas de prisión de dos a seis años”, le explicó al diario Clarín Marcelo D’Alessandro, secretario de Seguridad porteño.

Según datos del Ministerio de Justicia y Seguridad a cargo de Martín Ocampo, en uno de los casos, un joven de 15 años de Villa del Parque fue encontrado culpable de las llamadas efectuadas a una escuela técnica de la zona y lo que podía ser una broma para evitar un examen, terminó en una pesquisa realizada por la comisaría 47 con el consiguiente allanamiento para secuestrar el teléfono celular. Si bien fue declarado inimputable por ser menor de edad, el juez federal Marcelo Martínez Giorgi resolvió comunicar de los hechos a la directora del colegio al que iba el alumno.

En tanto, otro joven de 16 años había llamado al 911 para decir que había una bomba en el colegio al que acudía del barrio de Barracas. Tras las investigación, personal de la comisaría 8 dio con el domicilio del autor de la llamada. Tras el allanamiento en el que recolectó evidencia, un juzgado de primera instancia llamó a declarar al dueño del celular desde donde se había realizado la llamada. En este caso, el joven se negó a declarar pero al tener 16 años fue procesado sin prisión preventiva, pero sí fue considerado autor penalmente responsable del delito de intimidación pública.

“Con la tecnología actual, se puede llegar a los responsables a través del rastreo de la actividad telefónica y de la información suministrada por las compañías de telefonía celular y el por el trabajo de investigación de la Policía. De hecho, se están investigando más casos como éstos para dar con los responsables, sin descuidar el protocolo de seguridad ante la amenaza”, aseguró D’Alessandro.

Por su parte, la ministra de Educación porteña, Soledad Acuña, explicó como actúa su área. “Nos alarmó la cantidad de amenazas registradas este año que ya superaban a todos los caos de 2015. Muchas se repetían en colegios de la zona sur. Decidimos trabajar puertas adentro del colegio y con mucha colaboración de los padres”, relató.

Así, aseguró, pudieron también dar con algunos autores de las amenazas. “En algunos casos se los cambió de colegio y en otros tuvieron que hacer tareas reparatorias. Los chicos tienen que entender que este tipo de acciones tienen consecuencias. Y nuestras responsabilidad es educar sobre límites y responsabilidades”, concluyó.