Salud: se invierte más en el norte que en el sur de la Ciudad

Una de las áreas que refleja concretamente la diferencia en la inversión que aplica el gobierno macrista es la salud. El 17,8% de los porteños dependen exclusivamente del sistema público, pero en las comunas del norte (2, 13, 14), ese número baja a apenas el 4,1%, mientras que en las del sur (4, 8, 9, 10): tres de cada diez habitantes necesitan de los centros de salud públicos de la Capital Federal.

A pesar de que las estadísticas demuestran que en la zona sur de la Ciudad los ciudadanos necesitan más los hospitales públicos en copmparación con dos años tras, en general en la Capital Federal la salud pública se usa en términos generales un 1% menos que en 2007.

Además de la subejecución crónica en infraestructura se suma que en el presupuesto 2015, el Ejecutivo porteño destinó 17.244 pesos para cada usuario del sur y 39.428 de pesos para cada usuario del norte, según indicó Tiempor Argentino. La última Encuesta Anual de Hogares de la Dirección de Estadísticas y Censos porteña indicó que el 44,4% del distrito posee sólo obra social. Dentro de ese porcentaje, el 35,6% se encuentra en el norte y un 48,4% en el sur. Es decir, que casi la mitad de los porteños tiene una prepaga u obra social, aunque en el sur ese segmento no supera el 16%.

La utilización del sistema de salud pública es mayor entre los jóvenes. El 27,9% de los menores de 19 años deben atenderse en el sistema estatal. Aunque en los barrios del norte, estos jóvenes son tan sólo un 5,4% del total, mientras que en el sur son el 44,2%. Lo mismo sucede con los mayores de 60: el 1% en el norte y el 6,5% en el sur.

Evaluando el porcentaje que se utiliza para la salud dentro del presupuesto puede verse el bajo índice que se otorga. El año pasado se otorgó el 2,2% del presupuesto a esta área, mientras que en 2013 fue del uno por ciento. Otro ejemplo es que en 2007 el presupuesto superaba el 23% del total de la Ciudad y este año se proyectó sólo un 18,1%.

Toda decisión tiene sus consecuencias y esta puede verse en la tasa de mortalidad infantil. Cuando Mauricio Macri aumió por primera vez la jefatura de Gobierno la tasa era del 7,3 por mil, en 2013 llegó al 8,9. Pero en el sur, la tasa escaló hasta 10,7 por mil, más del doble que en el norte.