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- 22.06.2015
Los pueblos originarios recibieron el año nuevo en Costanera Sur
Se trata de la primera vez que los pueblos originarios de la cultura andina abren su festejo por primera vez a toda la comunidad. Se festejó durante la madrugada del 21.
En consonancia con el solsticio de invierno, los pueblos originarios de la cultura andina celebraron Inti Raymi, su año nuevo este domingo 21 y abrieron el festejo a toda la comunidad por primera vez. La celebración se realizó durante la madrugada de ayer en la Reserva Ecológica de Costanera Sur, en Buenos Aires. Alrededor de 150 personas se reunieron allí para esperar la salida del sol alrededor de una fogata en la noche más larga del año.
La invitación a todo aquel que deseara participar de la celebración circuló por las redes sociales y postulaba: “Este 21 de junio el Hemisferio Sur del Continente Fecundo. Estará reunido en círculo y ceremoniando en paridad y dualidad. Esperando toda la noche la salida de nuestro Inti Tayta. El Abuelo Fuego Nina Machula dará luz y calor a nuestro cuerpo y corazón. Entendiendo que un viejo ciclo se cierra y otro nuevo ciclo renace”.
Con la bandera Wiphala como insignia de la celebración, se realizaron fogatas a la vera del río y el fuego se mantuvo encendido hasta el amanecer. Primero sonó una caracola en cuatro direcciones, en referencia a los puntos cardinales y al ciclo de la vida: niñez, juventud, adultez, vejez. Hasta el amanecer hubo cantos acompañados por sikus y cajas, té y mate, charlas y algo de baile. Amaneció después de las siete y todos miraron al Este.
La ceremonia estuvo dirigida por Tayta Ullpu, profesor de lengua quechua en la Universidad de La Matanza y en el Centro Universitario de Idiomas, que depende la Universidad de Buenos Aires. Lo acompañó su hijo Rumi, y su nieto. “Esta ceremonia sagrada antes la hacíamos a escondidas porque nuestra espiritualidad ha estado proscripta. Pero el 3 de mayo nuestro hermano y presidente de Bolivia, Evo Morales, nos ha reconocido como sabios espirituales. Eso nos indicó que debíamos abrir las puertas de nuestra cosmovisión, invitar al que no es ni superior ni inferior, si no al que es diferente”, explicó Ullpu.
Los primeros días de mayo se llevó a cabo la Primera Cumbre Internacional de la Espiritualidad de los Pueblos Indígenas del Continente, en La Paz. Para Tayta, ese encuentro significó un apoyo al rescate de la sabiduría ancestral de los pueblos originarios. “De Europa sabemos todo, de nuestros pueblos originarios, no. Por eso invitamos a todos los hermanos y hermanas, a los que los corrió la guerra, a los que los corrió la religión”, aseguró Ullpu.
En consonancia con el solsticio de invierno, los pueblos originarios de la cultura andina celebraron Inti Raymi, su año nuevo este domingo 21 y abrieron el festejo a toda la comunidad por primera vez. La celebración se realizó durante la madrugada de ayer en la Reserva Ecológica de Costanera Sur, en Buenos Aires. Alrededor de 150 personas se reunieron allí para esperar la salida del sol alrededor de una fogata en la noche más larga del año.
La invitación a todo aquel que deseara participar de la celebración circuló por las redes sociales y postulaba: “Este 21 de junio el Hemisferio Sur del Continente Fecundo. Estará reunido en círculo y ceremoniando en paridad y dualidad. Esperando toda la noche la salida de nuestro Inti Tayta. El Abuelo Fuego Nina Machula dará luz y calor a nuestro cuerpo y corazón. Entendiendo que un viejo ciclo se cierra y otro nuevo ciclo renace”.
Con la bandera Wiphala como insignia de la celebración, se realizaron fogatas a la vera del río y el fuego se mantuvo encendido hasta el amanecer. Primero sonó una caracola en cuatro direcciones, en referencia a los puntos cardinales y al ciclo de la vida: niñez, juventud, adultez, vejez. Hasta el amanecer hubo cantos acompañados por sikus y cajas, té y mate, charlas y algo de baile. Amaneció después de las siete y todos miraron al Este.
La ceremonia estuvo dirigida por Tayta Ullpu, profesor de lengua quechua en la Universidad de La Matanza y en el Centro Universitario de Idiomas, que depende la Universidad de Buenos Aires. Lo acompañó su hijo Rumi, y su nieto. “Esta ceremonia sagrada antes la hacíamos a escondidas porque nuestra espiritualidad ha estado proscripta. Pero el 3 de mayo nuestro hermano y presidente de Bolivia, Evo Morales, nos ha reconocido como sabios espirituales. Eso nos indicó que debíamos abrir las puertas de nuestra cosmovisión, invitar al que no es ni superior ni inferior, si no al que es diferente”, explicó Ullpu.
Los primeros días de mayo se llevó a cabo la Primera Cumbre Internacional de la Espiritualidad de los Pueblos Indígenas del Continente, en La Paz. Para Tayta, ese encuentro significó un apoyo al rescate de la sabiduría ancestral de los pueblos originarios. “De Europa sabemos todo, de nuestros pueblos originarios, no. Por eso invitamos a todos los hermanos y hermanas, a los que los corrió la guerra, a los que los corrió la religión”, aseguró Ullpu.
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