Reclaman que la Ciudad cumpla con las obras en un comedor escolar

Padres, alumnos y docentes de la escuela Ángela Caviglia del barrio porteño de Floresta realizaron esta mañana un abrazo simbólico en la puerta del establecimiento para exigir al gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que cumpla con la refacción del comedor ya que es un espacio muy reducido, con rejas en la ventana y sin salida de emergencia.

El colegio, ubicado en avenida Rivadavia y Mariano Acosta, es de modalidad de jornada completa y diariamente almuerzan allí unos 200 alumnos del nivel primario.

“El comedor está en un segundo piso, al que se ingresa únicamente por una escalera muy pequeña y representa un peligro tener que hacer subir y bajar a 200 alumnos todos los días”, aseguró Natalia Militi, de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE).

Y agregó: “Hace muchos años que este edificio funciona como escuela y nunca se refaccionó algo tan indispensable como el comedor, el tema es que en los últimos años se incrementó notablemente la matricula”.

La gremialista explicó que la distribución del comedor “es rara, no es la convencional” ya que cuenta con “un salón más grande y luego habitaciones con mesas y bancos, por ello los chicos no almuerzan todos juntos sino en distintas salas”.

“Lo más preocupante es que no hay salida de emergencia mas que la misma escalerita de entrada, esto es muy riesgoso ante algún siniestro”, afirmó Militi.

Asimismo, aseguró que “hace mucho que el gobierno porteño prometió a los padres realizar estas obras, incluso hasta hubo un llamado a licitación, pero todo queda en la nada y por eso hoy se realizó esta protesta”.

Además de la refacción del comedor, los padres de los alumnos que asisten a esa escuela reclaman la realización de una rampa de accesibilidad y un baño para personas con movilidad reducida.