“Hay que descabezar a las jefaturas mafiosas que están recaudando del delito en lugar de combatirlo”

Gustavo Vera es legislador porteño y precandidato a jefe de Gobierno por Bien Común. Es docente de escuelas públicas y titular de la Fundación La Alameda, que tiene como objetivo denunciar casos de trata de personas, narcotráfico, explotación infantil y trabajo esclavo.

En diálogo con Nueva Ciudad, Vera habló sobre la gestión macrista, el proyecto que tiene para la Ciudad y cuáles son sus expectativas para las PASO porteñas del 26 de abril.

Por Leila Lobos

¿Cuáles son las críticas y si hay algo positivo para destacar de la gestión macrista?

Lo positivo para destacar es que se ha mejorado mucho el cuidado de las calles y de los parques, la construcción del Metrobus, por ejemplo el de Juan B. Justo, realmente ha acortado la distancia de la gente que va a trabajar y ha mejorado la calidad de servicio del transporte público. Las fachadas de escuelas y hospitales ha mejorado, como alguna parte de pavimento también.

Lo negativo está dentro de lo positivo. Todo lo que ha hecho el macrismo, que en general no es criticable en sí mismo, está cargado de sobreprecios realmente extraordinarios que hace que se recorten partidas esenciales para la calidad vida de los vecinos. El presupuesto enfoca muchísimo en obras públicas y reduce significativamente, año tras año, en la áreas que tienen que ver con la vivienda, la salud y la educación.

Lo primero que nosotros cuestionamos son los sobreprecios. En el área de transporte lo que criticamos es que no se haya terminado la línea H y que falten 30 kilómetros para construir de subterráneo, que el macrismo se había comprometido a hacer y no hizo. Pensamos que el subte es el servicio más seguro, más rápido y menos contaminante. Sin embargo, no se ha puesto énfasis en avanzar en esta dirección, salvo lo que ya venía haciendo el gobierno anterior y que el macrismo apenas si lo terminó.

Pensamos que en materia de basura hay que auditar completamente los acuerdos que hay con las empresas de recolección de residuos. Hay que volver a destrabar las comisiones vecinales participativas por comuna para que monitoreen cómo se cumple ese servicio de recolección de residuos. Y terminar con una auditoría o una especia de consultoría, porque a las empresas que se le pagan 200 millones de pesos para eso no hacen un control muy efectivo de lo que está pasando con el tema de la basura. Hay que fortalecer y potenciar a las cooperativas con personal calificado que están en este momento separando el materia reciclable para cumplir más profundamente con la iniciativa “Basura Cero”.

En materia de educación, hay que construir 33 escuelas públicas en la zona sudeste de la CABA, hay que garantizar que haya sólo 25 alumnos por aula y no 33, o 34, o 35 como hay hoy en varios lugares del sudeste de la capital. Hay que evitar el traslado masivo de chicos de un barrio a otro, creando escuelas en la propia jurisdicción.

Hay que garantizar concretamente las áreas de emergencia social, creando algún incentivo para los docentes que trabajan en escuelas con alumnos que sufren alta vulnerabilidad. También en educación hay que insistir en la prevención de adicciones, de trata de trabajo esclavo, de uso responsable de las redes sociales. Esto tiene que estar en los manuales y ser de lectura obligatoria, tanto para los docentes como para los alumnos.

En lo que tiene que ver con los hospitales públicos: jerarquizar las áreas críticas, mejorar sustancialmente el salario de anestesistas y terapistas, que se están yendo del área pública a la privada. Porque la diferencia de pago es enorme entonces hace que tengamos las zonas críticas prácticamente desmanteladas, con equipamiento y quirófanos pero sin personal. Esto genera demoras en la lista de espera, prácticamente en todos los hospitales, en lo que tiene que ver con obtener operaciones de mediana complejidad. Hay que garantizar y mejorar el servicio de enfermería, declarándolo como insalubre; hacer jornadas laborales de seis horas manteniendo el mismo nivel de salario. Concretamente, para garantizar lo que es el motor del hospital público que es la enfermería.

En relación a los hospitales públicos, hace poco tiempo se realizó un paro debido a la falta de seguridad en los mismos, ¿qué opinión tiene sobre el tema?

No solamente la seguridad en los hospitales públicos, sino también en los transportes y en los colegios. Lo primero que hay que hacer es traspasar la Policía Federal con los recursos correspondientes para que la Ciudad recupere plenamente su autonomía. Los tribunales de la justicia penal ordinaria tienen que pasarla al ámbito porteño. Y luego, hay que descabezar completamente a las jefaturas mafiosas que están recaudando del delito en lugar de combatirlo.

La Alameda sabe bastante sobre el tema porque somos los que hemos denunciado 1.200 prostíbulos en la Ciudad, más de 3.000 talleres clandestinos, cocinas de clorhidrato de cocaína y cientos de puntos narcos. Sabemos perfectamente donde está el delito y cómo se lo combate.

Por lo tanto, hay que hacer una fuerte purga concretamente en las Jefaturas, auspiciando las sindicalización de las fuerzas de seguridad y estableciendo asuntos internos en manos de civiles.

Desde el punto de vista penal hay que incautar los bienes de la mafia, de los delincuentes y reutilizarlos socialmente. No solamente imputar penalmente a quien comete un delito, sino además incautarle el objeto del mismo y reutilizarlo socialmente, si es posible. Por ejemplo, si se allana un bunker narco no solamente tener el estadio del procesamiento y la detención de los eventuales delincuentes, sino también reutilizar socialmente esa propiedad que estaba siendo utilizada en forma delictiva.

¿Qué piensa de la propuesta de Horacio Rodríguez Larreta de extender la Policía Metropolitana a toda la Ciudad?

Larreta quiere extender la Policía Metropolitana a la capital, pero por otra parte se lava las manos frente al fenómeno del narcotráfico. Cuando visitó la Legislatura, le preguntamos por qué la Policía Metropolitana no intervenía frente al narcotráfico aunque sea a modo de denuncia en el Juzgado federal correspondiente. La respuesta textual de Larreta fue: “Solamente intervenimos en tierra de narcotráfico cuando lo ordena un juez”.

Pero el juez no es el espíritu santo que mira en todas las esquinas y en todos los barrios de la Ciudad. Si la Metropolitana detecta delitos in fraganti tiene obligación de actuar y de dar parte al juez. Lo cierto es que el gobierno de la Ciudad jamás denunció a las cocinas y al territorio narco liberado, que es la 1-11-14, ni ninguno de los puntos de narco menudeo que La Alameda ya descubrió en barrios de clase media y alta. Es decir, que hasta ahora han incumplido los deberes de funcionario públicos. Porque aunque no tengas la competencia para intervenir en tal o cual delito, si tienen la obligación de elevar la denuncia y la expresión política correspondiente para que se imparta justicia.

¿Cuál es el proyecto de Bien Común para la Ciudad?

La propuesta en grandes rasgos es que tenemos el segundo presupuesto más alto del país, que si lo dividís por todos los porteños te da 30 mil dólares por cápita, de lo que te da Nación. Hay que rejerarquizar los rubros y tiene que aumentarse el presupuesto destinado a salud, vivienda y educación. Tienen que auditarse todo lo relacionado a obras públicas, porque hemos descubierto que en la mayoría de los casos tenemos una enorme cantidad de sobreprecio.

Hay que regular las viviendas ociosas, concretamente para que se vuelquen al mercado del alquiler o para que sean destinadas a adelantar los créditos hipotecarios. Se deben construir 33 escuelas en el sureste de la Capital para cubrir el faltante de vacantes. Tienen que optimizarse los jardines maternales integrales y urbanizarse integralmente los asentamientos. Esto significa tendido eléctrico, cloacas, agua potable, hospitales, escuelas y una vivienda por familia.  Esto último en contraposición a lo que pretende hacer actualmente el gobierno de la Ciudad que es entregar discrecionalmente títulos de propiedad a determinados amigos, que tienen en los asentamientos. Esto deja a mucha gente en extrema vulnerabilidad.

Hay que generar trabajo, no está mal crear distritos, como el tecnológico o el metalúrgico, que pretende crear empleos. El problema es que la idea en sí mismo no es mala, lo que falla es la implementación. Porque en la práctica estos distritos se convierten en zonas francas donde los empresarios no pagan impuestos y no tienen como contraprestación obligatoria crear x cantidad de puestos de trabajo. Por ejemplo, en el distrito tecnológico de Parque Patricios se han instalado 100 empresas que se han beneficiado con la exención impositiva, pero no han beneficiado a los ciudadanos creando los 35 mil puestos de trabajo que habían prometido.

¿Qué expectativas tiene para las PASO?

Si nos guiamos por la recorrida en los barrios la gente nos visibilizan, es consciente de lo que venimos haciendo, conoce la lucha que estamos dando y sabe que estamos devolviendo el 60% del salario porque estamos en contra de que los funcionarios ganen sueldos de Emiratos Árabes Unidos. Pensamos que tienen que ganar lo mismo que un director de escuela.

La gente nos respeta mucho, nos conoce y nos quiere. Hemos tenido muy buenas recepciones en muchos barrios. Ahora cómo se va a traducir eso en votos, la verdad que no lo sé. Si sé que las primarias abiertas las pasamos y que vamos a hacer una buena elección, pero no puedo decirte en números cuánto va a ser esa buena elección. Porque no tenemos plata para pagarles a encuestadores.