Mundial LGBTQ en Argentina: “La tercera categoría va a romper con lo que se suele ver en el deporte”

En 1997 un grupo de amigos gays decide armar un equipo de fútbol. Un año después son invitados a competir en Alemania y para lograrlo conforman la asociación Deportistas Argentinos Gays (DAG). Diez años, se nombran como Los Dogos y organizan y participan del 10 ° Mundial de Fútbol Gay en Argentina. Con un resultado de 1-0, Los Dogos le ganan a los Stonewall de Inglaterra y se convierten en campeones mundiales del fútbol gay dando una gran visibilidad al torneo y al trabajo realizado en esa década.
 
“Creo que hoy en día cuando uno dice Los Dogos tiene como el reconocimiento de que es la selección de fútbol gay o la selección LGBT”, explicó Hugo Melano a Nueva Ciudad, quien cuenta que varios años después, en 2015, llegan invitaciones a otros torneos internacionales y surge la necesidad, nuevamente, de crear una asociación que “en ese momento se había perdido con la DAG”. “Era más fácil crear una nueva Asociación que abrir la que ya estaba antiguamente, por cuestiones administrativas”, detalló Melano.
 
Así nace la Asociación Argentina de Deportistas por la Diversidad (AADD), que aborda tareas deportivas, pero también de trabajo social. Entrevistado por Nueva Ciudad, Melano habló de cómo vieron las polémicas delos Juegos Olímpicos 2024 y el transodio que estas expusieron; cómo trabajar la identidad de género en los clubes de barrio para “crear espacios más seguros”. Y lo más importante: la organización del Mundial LGBT, donde se pudo aprobar la tercera categoría para las personas trans y no binarixs. El evento es de carácter oficial y es el primer país de América en realizarlo.
 
¿Cuáles son los objetivos y tareas que realizan desde la AADD?
 
La Asociación actualmente se abrió  a otras disciplinas y a ver la necesidad a nivel nacional. En ese sentido, buscamos crear algo que nos permita ver las problemáticas en todo el país y que pueda albergar a otras organizaciones. Actualmente, en Argentina hay más de 45 organizaciones LGBT deportivas. La nuestra en particular cuenta con 11 disciplinas, creo que es la más grande a nivel nacional.
 
Ahora, se abrió la posibilidad de formar parte de una comisión de la Cámara de Diputados. Nosotros colaboramos mucho con la Confederación Argentina de Deporte y lo que ellos quieren es que nosotros organicemos una comisión que agrupe a todas las organizaciones a nivel nacional. Actualmente existen dos organizaciones que agrupan. Nosotros buscamos una coordinación federal y que no tenga que ver más con cuestiones políticas partidarias.
 
En su página, hablan del trabajo deportivo, pero también del trabajo social. ¿De qué se trata esa dimensión?
 
Claro. Nosotros comenzamos con una necesidad deportiva para mantener o crear espacios más seguros en el deporte. Después vimos que había que hacer un trabajo social entonces empezamos a analizar las necesidades que surgían. Por ejemplo, cuando salió la Ley de Identidad de Género era como que la gente de los clubes no sabía cómo aplicarla dentro de sus instituciones entonces lo que se hacía era de acuerdo a la necesidad se creaban capacitaciones.  Hicimos capacitaciones de VIH, de nutrición, de hormonización porque también tiene que ver las etapas del cuerpo en el periodo de competencia. Que es muy diferentes el hombre, la mujer, las personas que están en proceso de hormonización, entonces se ven esas cosas. De acuerdo a cada necesidad hacíamos algún tipo de capacitación. Empezamos a tener gente hipoacústica, entonces empezamos a tener capacitaciones de lenguaje de señas.
 
¿Cómo se dio esa vinculación con los clubes de barrio?
 
Esta problemática la empezamos a ver mucho cuando empezaron a aparecer las personas trans en los clubes de barrio y esos espacios. No lo veíamos en gays o lesbianas, pero cuando las personas trans y los diferentes cuerpos aparecen, empieza ese ruido en los clubes. Diría que empezamos hace dos años a trabajar sobre esta problemática, a verse ese rechazo o esa imposibilidad de tener un espacio seguro.
 
En todos los espacios que fuimos con personas trans, sea público o privado, siempre tuvimos problemas. Siempre había un “pero” o un “no sabemos cómo se aplica”, en todos hubo algo. Se dio a capacitación a profesores, directivos y demás y la verdad que los clubes después de eso empezaron a cambiar, empezarnos a  poner cartelería.  Y, entonces, se generaban nuevos puntos de referencia para la comunidad LGBT. Los clubes nos decían que había más gente.
 
Por ejemplo, nos pasó en un club que tenía bufet y empezaron a ir las parejas gays a cenar. Tomaron el lugar como uno seguro de referencia. Ahora no se tienen que ir hasta Palermo o a un lugar bar gay para comer algo. No, van al club del barrio. Recuperamos esos espacios.
 
Te traigo un poco a la coyuntura, es el último fin de semana de los Juegos Olímpicos París 2024 y se dieron muchas polémicas en torno a la identidad de género de deportistas, quizás las más difundida fue la de la boxeadora argelina Khelif. ¿Cómo vieron y sintieron esas discusiones?
 
Nosotros cuando enteramos de esto, empezamos a leer, pero también toda la información que muchas veces pasaba no era la correcta. En ese sentido, vimos que era muy importante que aclaren un poco el tema en los medios de comunicación de lo que había pasado realmente. Pero, lamentablemente todo lo que sería el suceso, el hecho, las acciones, todo lo que pasó, nos escapaba también de nuestra realidad.
 
Sin embargo, nos interpela para ver qué es lo que tenemos que trabajar para que no vuelva a pasar esto. Nosotros ahora tenemos los dos mundiales, estamos justo en ese contexto de discutir criterios porque hay mucha participación de personas trans, y son eventos deportivos que van a estar fiscalizados. Entonces, cómo sentarte con las Confederaciones y las Federaciones, que son los organismos que más pesan y a la vez los más atrasados en cuanto a la inclusión.
 
Nosotros debatimos mucho sobre algo que se discute mucho sobre las ventajas deportivas, hablan de la tercera categoría. Sobre esto hay un montón de ideologías. Dentro del colectivo LGTB también se manejan un montón de cuestiones políticas o ideológicas diferentes. Hay organizaciones que aportan que el deporte no haya categoría, por ejemplo. Mientras que otras dicen que habría que hacer una tercera categoría.
 
También empezamos a abordar el debate de estas cuestiones que tiene la gente en los torneos. Ese es el primer motivo por lo que empezamos nosotros también a ver dentro de nuestro espacio. Nosotros lo que tratamos de hacer es cambiar un poco la regla del deporte.
 
Lo que hicimos para el evento de noviembre es ampliar un poco la posibilidad, más que nada, pusimos una tercera categoría en cuanto a la competencia individual. Porque también hay que diferenciar si es una competencia individual o grupal, de contacto o no de contacto. Por ejemplo en futbol no pasa nada porque una persona trans puede entrar libremente en cualquiera de las categorías y géneros. El problema surgía en las individuales donde se habla de la ventaja deportiva, que nosotros también debatimos.
 
Entonces, se habló y se acordó una tercera categoría para que todas las personas trans, no no binarias y también para gente que no está en condiciones de competir a nivel mundial, porque al ser un campeonato mundial implica que viene gente federada. Imagínate que Estados Unidos trae 200 nadadores y nosotros somos 150, pero el nivel que ellos tienen es muy grande. Entonces pensamos esta categoría también para poder decirles a los federados que compitan en sus categorías correspondientes y para quienes no se sientan segures de competir o sentís que tu nivel no va a estar bueno, podes entrar a la tercera categoría.
 
La tercera categoría es una serie donde no vas a ver un sólo género. En esa serie puede haber toda la disidencia que se te imagine. Entonces, va a romper un poco lo que venimos viendo normalmente en el deporte. Para esto tuvimos el apoyo de la AFA y el dela Confederación Argentina de Deportes Acuáticos. En su momento, se habían negado porque tenían miedo que la World Aquatics (Federación deportiva internacional) sancionen. Sin embargo, esta organización internacional recomienda esta categoría aunque nunca la aplicaron.
 
Dentro de este debate, hay una respuesta fácil que es decir “no compite”, ¿crees que esa postura de expulsión van en contra del objetivo más primario del deporte que es la inclusión?
 
Yo siempre explicó lo mismo, empecé a hacer deportes de adulto, a los 25 años. No me crían con esa enseñanza de ir a clubes ni nada por estilo. También empecé a competir a nivel internacional dentro de la agrupación. Gracias a Los Dogos pude hacer todo o que no había podido hacer de chico. He competido a nivel internacional en tres países y nunca hice podio. Pero mi cuestión de ir a competir, o mi ideología de podio, son diferente a lo que la mayoría piensa. Bueno le ha pasado a toda la Selección argentina, muchas veces te exigen muchas cosas y nosotros acá dentro del colectivo LGBT tratamos de dar otra idea de lo que es podio, la competencia.
 
Se viene en noviembre entonces esta competencia, ¿cómo están los preparativos?
 
El Mundial LGBT se va a hacer del 4 a 9 de noviembre, después de la Marcha del Orgullo que se realiza el sábado 2 de noviembre. Los primeros días va a estar el Mundial de Deportes Acuáticos con sus cinco disciplinas y el Mundial de Fútbol, con cancha de 8 y de 11. Además, el 9 y 10 de noviembre se van a sumar otras disciplinas como voley, tenis y fútbol 5 femenino.
 
Se van a hacer en diferentes sedes: CeNARD, Parque Roca, Pileta Olímpica de Avellaneda. Esto marca que estamos trabajando con los tres gobiernos actuales. Durante esta semana van a haber eventos culturales, sociales, derechos humanos. Se van a hacer muchas capacitaciones. La idea es que además de los deportivos marcar cómo estamos parados socialmente.
 
La idea es que la final de fútbol salga en el Estadio Único de La Plata. Ya nos juntamos con el director de allá en el estadio, lo firmamos, esperamos que la cancha esta lista.


¿Cómo se realizan las inscripciones?

El evento cuenta ya con la participación de más de 20 países, ya se inscribieron casi 30 equipos de fútbol, 20 equipos de waterpolo, entre otros, con un total aproximado de 2.500 deportistas LGBT,  y con la colaboración de más de 200 voluntariadx. Seguimos buscando sponsor o cualquier tipo de ayuda es siempre bien recibida!  
Pueden escribir a Hugo Melano al +54 9 11 6954 3270, al mail [email protected] y a través de la página aadd.org.ar