Para el defensor porteño las eléctricas fracasaron en prestar un servicio de calidad

El Defensor del Pueblo porteño, Alejandro Amor, participó de la audiencia por el aumento de la tarifa de la luz en el AMBA, y reclamó a las empresas distribuidoras del servicio eléctrico “un plan de contingencia para este verano, porque pese al incremento los cortes no cesarán".
 
El ombudsman porteño comenzó criticando a las empresas, por haber “fracasado” en su compromiso de “realizar inversiones y prestar un servicio de calidad”. De la misma manera arremetió contra el ENRE, quien debería “controlar y regular el nivel y la prestación e inversión de las empresas”. “También fracasó”, disparó el Defensor.
 
También criticó los “subsidios” que “durante muchos años” brindó el Estado, porque “los subsidios no deben ser dirigidos a las empresas sino que deben ser direccionados directamente a los usuarios y consumidores, que son las personas que los necesitan”, consideró.
 
“¿Y cuál es el ejemplo más claro del fracaso”, se preguntó Amor y respondió: “Los cortes que han padecido todos los sectores de la sociedad de la Ciudad de Buenos Aires y de los barrios del Gran Buenos Aires. Los trabajadores, las clases medias. Cortes que muchas veces fueron imprevistos y que se desconocía su duración. Cortes que muchas veces fueron programados y anunciados con periodos concretos, pero que se prolongaron más de lo establecido”.
 
“Estos cortes –continuó Amor- han afectado a la sociedad en su conjunto, a las organizaciones, a los comercios, las pymes, las industrias, los clubes de barrio, los centros de jubilados. Han afectado  a los vecinos. Han afectado a lo que ellos llaman clientes y nosotros llamamos personas, que son usuarios y consumidores que tienen derechos constitucionales garantizados por el artículo 42 de la Constitución Nacional. No son clientes, son personas con derechos y deben ser respetados como tales”, dijo, en el tramo más vehemente de su discurso.
 
Por esa razón, la Defensoría del Pueblo porteña les exigió a las empresas que elaboren “un plan de contingencia para este verano con la incorporación de grupos electrónicos y cuadrillas, porque aumentará la tarifa y aún así habrá cortes de luz”. En la misma línea, le reclamó a Edenor y Edesur que se “hagan cargo del pago de las multas establecidas por el ENRE, porque en un sistema capitalista tienen el derecho de invertir y ganar. Pero también tienen responsabilidad social y cuando no cumplen con las inversiones y hay cortes de luz que perjudican a los usuarios”, aseguró Amor.
 
El Defensor del Pueblo porteño propuso:
-Que se establezca una tarifa social única, homogénea y de simple acceso para todo el espectro de beneficiarios.
 
-Establecer un tarifa especial para las pymes y que los aumentos que se decidan vayan de la mano de los incrementos paritarios.
 
-Que se actualice el reglamento de los usuarios de servicios públicos y que se elabore un plan de contingencia para este verano, cuando se suceden con más frecuencia los cortes de energía (el verano pasado se registraron 10.000 reportes de interrupciones del suministro eléctrico en la Ciudad; Villa Crespo, Flores, Almagro, Caballito y Balvanera fueron los barrios más afectados).
 
-La construcción de un Consejo de Control de las dos empresas prestadoras del servicio que plantearon un cuadro de inversión con nuevas tarifas, que esté integrado por el ENRE pero también por las Defensorías del Pueblo, las asociaciones de consumidores y el Poder Legislativo. Este consejo deberá elaborar informes semestrales sobre el cuadro de inversión y el cuadro tarifario.
 
-Que se reconozca el acceso a los servicios públicos esenciales como un derecho humano.
 
 
UN PÚBLICO ADVERSO
 
Tras su exposición en la Audiencia Pública de hoy, Amor dialogó con Radio Del Plata y denunció que “el 80% de los invitados de hoy eran empleados de Edesur, Edenor y el ENRE, que aplaudieron el tarifazo”.