La madre de Nisman quiere que la muerte del fiscal sea considerada delito de lesa humanidad

Sara Garfunkel, la madre del fallecido fiscal Alberto Nisman, reclamó a la Justicia que la muerte de su hijo, ocurrida el 18 de enero de 2015, sea considerada “un delito de lesa humanidad”. El planteo fue realizado por la querella que encabeza la mujer, en respuesta al juzgado de instrucción a cargo de la jueza Fabiana Palmaghini, tras un pedido de nulidad formulado por la defensa del informático Diego Lagomarsino.

"El suceso investigado constituye un delito de lesa humanidad, por ende imprescriptible, en cuanto se trata del homicidio agravado en un escenario de zona liberada perpetrado contra el fiscal general Natalio Alberto Nisman y consumado a raíz de su rol funcional como titular de la Unidad Fiscal de Investigaciones del Atentado contra la AMIA", planteó el abogado Pablo Lanusse, representante de Garfunkel. Previamente, el letrado de Lagomarsino había reclamado la nulidad luego de que se le diera intervención al FBI en un peritaje criminológico, por considerar que hacer participar a un organismo extranjero podía afectar el “plazo razonable” que deben durar las causas”.

Ante eso, Lanusse sostuvo que "resulta inadmisible invocar la supuesta afectación del plazo razonable en beneficio de Diego Lagomarsino, de atender también los derechos inherentes a la víctima, así como la trascendencia y gravedad que configura el objeto procesal de los autos principales". El pedido por considerar la muerte del fiscal como delito de lesa humanidad apunta a la imprescriptibilidad de la investigación, que permanece en el fuero de instrucción y que ahora definirá la Corte Suprema de Justicia si queda allí o pasa al federal.