Una multitud en la carrera que alienta la separación de basura

Más de nueve mil personas corrieron por las avenidas principales de la Ciudad para concientizar sobre la separación de residuos. Divididos en circuitos, uno para los “reciclables” identificados con remeras verdes y otro para los “orgánicos” con camisetas negras, se desplazaron a lo largo de cuatro kilómetros.

Los corredores comenzaron a llegar a los alrededores de Plaza de Mayo entre las seis y las 8. Algunos aprovecharon la espera para entrar en calor, otros para rechequear el circuito, y todos debieron retirar una gorra y una remera verde o negra -según el equipo que integraran- de una carpa ubicada en Avenida De Mayo y Tacuarí.

La carrera se largó a las 9 en el cruce de Avenida De Mayo y Bolivar y a la altura de Casa Rosada los corredores fueron separándose en dos mareas. Los reciclables avanzaron por las avenidas Leandro N. Alem, Córdoba, Carlos Pellegrini y Presidente Roque Sáenz Peña hasta la meta en Plaza de Mayo. Mientras que los orgánicos corrieron por las avenidas Paseo Colón, Independencia, Bernardo de Irigoyen y Belgrano hasta la llegada en Julio Argentino Roca y Bolívar. Fueron dos colores y dos recorridos para ilustrar a los vecinos y a los competidores sobre la obligación de separar los residuos orgánicos de los reciclables.

Se estima que en la Ciudad se generan 6.000 toneladas de basura por día, pero sólo se recuperan 1.000 de los residuos domiciliarios. Aunque, de a poco, se está dando un cambio de conciencia en el que cada vez más vecinos se acercan a los puntos verdes del Gobierno porteño para entregar sus residuos reciclables. Estos pueden ser bolsas y films plásticos, envases de tetra-brick, telas, latas, botellas, vidrios que no estén rotos, metales, telgopor, papeles y cartones. En los barrios, además todavía quedan campanas verdes, que reciben materiales reciclables, que deben ser dispuestos ahí secos y limpios.

También, contenedores negros, que están para tirar restos de comida, vidrios rotos, lamparitas, focos y tubos fluorescentes, espejos, envases plásticos con líquido o pegamento, todos deben disponerse en bolsas cerradas.