- Archivo
- 21.05.2015
Trabajadores de ex Donelley y World Color acusan a Sergio Slep del vaciamiento empresarial
Representantes legales de los trabajadores de la cooperativa Madygraf, formada tras la quiebra de la empresa gráfica Donnelley, denunciaron que el ex gerente de ese firma, Sergio Slep, llevó a cabo una maniobra de vaciamiento que se extiende a la compañía World Color, que recientemente anunció el despido de 280 empleados.
Los abogados Myriam Bregman y Agustín Comas presentaron -el pasado 21 de abril- un escrito ante el Juzgado Criminal Correccional 3 que encabeza Daniel Rafecas, en el que señalan que Donelly, a través de Slep desviaba fondos a las islas Caimán y las Bermudas por 160 mil dólares, según registros que fueron hallados en la gráfica.
Los letrados consignaron que, mediante operaciones gestionadas por la financiera Raymond James, se enviaron -presuntamente desde Uruguay- los fondos de Donnelley a esos paraísos fiscales.
"Denunciamos además que Donnelley fue vaciada meses antes de su quiebra con el desvio de su producción a otros talleres gráficos. Se encontraron 100 toneladas de papel en un depósito de Quilmes que eran propiedad de la empresa y no se utilizaron. Se adujo una crisis de productividad que no existía", señaló Comas en diálogo con Télam.
Tras 25 años de trabajo en la empresa, Slep se alejó de Donnelley en diciembre de 2013, y ocho meses después, se decretó la quiebra.
El cierre de la planta de Garín motivó la reacción de los trabajadores, quienes se movilizarán contra los despidos y la quiebra, decretada por el juez Gerardo Santicchia en 24 horas.
Por entonces, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner criticó la resolución del magistrado, al calificarla como "una quiebra récord", y denunció que se trataba de "una maniobra de los fondos buitre".
La mandataria apuntó contra Blanck Rock, un fondo que tiene buena parte del paquete accionario de RR Donnelley & Sons Company, la casa matriz de esta gráfica fallida en el país.
"La casa matriz de Donnelley giró desde Estados Unidos tres millones de pesos para incrementar la producción de su planta en Argentina. Días después, Slep se desvincula y cobra una indemnización por ese mismo monto", aportó Comas.
En los últimos meses de su actividad, la empresa recibió los subsidios de Recuperación Productiva (REPRO), por el cual el Estado se hace cargo de una parte de los salarios con el objetivo de evitar despidos.
"El propio Slep, que cobraba un salario de 84 mil pesos por mes, percibía un REPRO por mil 500 pesos. Y meses después, decide irse de Donnelley", repasó el letrado. Ante la situación consumada del cierre, los trabajadores se organizaron y formaron la cooperativa Madygraf y lograron poner la planta en marcha.
La Cámara de Diputados de la Legislatura bonaerense le dio media sanción a un proyecto de ley para expropiar las instalaciones de la ex Donnelley en favor de los cooperativistas, mientras tanto se aguarda que el Senado trate esta iniciativa.
Los integrantes de la cooperativa indican que ahora deben lidiar con las gestiones que lleva a cabo el abogado Diego Hernán León Prandi, quien impulsa la venta de las instalaciones de la ex Donnelley para que sus antiguos ejecutivos cobren las indemnizaciones.
Además, el juez Santicchia -a cargo de la causa- retiene el 15% de todos los trabajos cobrados por Madygraf.
Por su parte, Slep se incorporó en febrero de 2014 a la firma Quad Graphics, que controla las empresas de servicios gráficos World Color y Morvillo S.A.
A principios de mayo, World Color, pidió su concurso preventivo de acreedores y envió cartas de despido a los 280 trabajadores de la planta que posee en Pilar.
Ante este conflicto laboral, el Ministerio de Trabajo decretó una conciliación obligatoria que venció hoy, y los trabajadores denunciaron que la patronal violó esta instancia de negociación al "desviar la producción hacia otros talleres".
"Creemos que bajo la dirección de Slep se lleva a cabo en World Color un proceso de vaciamiento similar al sufrido por la ex Donnelley. Se terceriza la producción hacia talleres pequeños; se denuncia una baja de actividad y se lleva a cabo un cierre", explicó.
Y puntualizó: "Con esta situación, el mercado de la producción gráfica se concentraría entre Quad, que reduciría su personal conservando Morvillo, y AGR, un emprendimiento perteneciente al Grupo Clarín".
Los abogados Myriam Bregman y Agustín Comas presentaron -el pasado 21 de abril- un escrito ante el Juzgado Criminal Correccional 3 que encabeza Daniel Rafecas, en el que señalan que Donelly, a través de Slep desviaba fondos a las islas Caimán y las Bermudas por 160 mil dólares, según registros que fueron hallados en la gráfica.
Los letrados consignaron que, mediante operaciones gestionadas por la financiera Raymond James, se enviaron -presuntamente desde Uruguay- los fondos de Donnelley a esos paraísos fiscales.
"Denunciamos además que Donnelley fue vaciada meses antes de su quiebra con el desvio de su producción a otros talleres gráficos. Se encontraron 100 toneladas de papel en un depósito de Quilmes que eran propiedad de la empresa y no se utilizaron. Se adujo una crisis de productividad que no existía", señaló Comas en diálogo con Télam.
Tras 25 años de trabajo en la empresa, Slep se alejó de Donnelley en diciembre de 2013, y ocho meses después, se decretó la quiebra.
El cierre de la planta de Garín motivó la reacción de los trabajadores, quienes se movilizarán contra los despidos y la quiebra, decretada por el juez Gerardo Santicchia en 24 horas.
Por entonces, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner criticó la resolución del magistrado, al calificarla como "una quiebra récord", y denunció que se trataba de "una maniobra de los fondos buitre".
La mandataria apuntó contra Blanck Rock, un fondo que tiene buena parte del paquete accionario de RR Donnelley & Sons Company, la casa matriz de esta gráfica fallida en el país.
"La casa matriz de Donnelley giró desde Estados Unidos tres millones de pesos para incrementar la producción de su planta en Argentina. Días después, Slep se desvincula y cobra una indemnización por ese mismo monto", aportó Comas.
En los últimos meses de su actividad, la empresa recibió los subsidios de Recuperación Productiva (REPRO), por el cual el Estado se hace cargo de una parte de los salarios con el objetivo de evitar despidos.
"El propio Slep, que cobraba un salario de 84 mil pesos por mes, percibía un REPRO por mil 500 pesos. Y meses después, decide irse de Donnelley", repasó el letrado. Ante la situación consumada del cierre, los trabajadores se organizaron y formaron la cooperativa Madygraf y lograron poner la planta en marcha.
La Cámara de Diputados de la Legislatura bonaerense le dio media sanción a un proyecto de ley para expropiar las instalaciones de la ex Donnelley en favor de los cooperativistas, mientras tanto se aguarda que el Senado trate esta iniciativa.
Los integrantes de la cooperativa indican que ahora deben lidiar con las gestiones que lleva a cabo el abogado Diego Hernán León Prandi, quien impulsa la venta de las instalaciones de la ex Donnelley para que sus antiguos ejecutivos cobren las indemnizaciones.
Además, el juez Santicchia -a cargo de la causa- retiene el 15% de todos los trabajos cobrados por Madygraf.
Por su parte, Slep se incorporó en febrero de 2014 a la firma Quad Graphics, que controla las empresas de servicios gráficos World Color y Morvillo S.A.
A principios de mayo, World Color, pidió su concurso preventivo de acreedores y envió cartas de despido a los 280 trabajadores de la planta que posee en Pilar.
Ante este conflicto laboral, el Ministerio de Trabajo decretó una conciliación obligatoria que venció hoy, y los trabajadores denunciaron que la patronal violó esta instancia de negociación al "desviar la producción hacia otros talleres".
"Creemos que bajo la dirección de Slep se lleva a cabo en World Color un proceso de vaciamiento similar al sufrido por la ex Donnelley. Se terceriza la producción hacia talleres pequeños; se denuncia una baja de actividad y se lleva a cabo un cierre", explicó.
Y puntualizó: "Con esta situación, el mercado de la producción gráfica se concentraría entre Quad, que reduciría su personal conservando Morvillo, y AGR, un emprendimiento perteneciente al Grupo Clarín".
- SECCIÓN
- Archivo
COMENTARIOS