Vecinos desalojados del predio de Lugano marcharon en reclamo de una solución habitacional

Cientos de familias desalojadas del barrio Papa Francisco el sábado pasado pidieron soluciones habitacionales para las familias que aun acampan frente al predio y marcharon desde el Obelisco hasta la jefatura de gobierno porteño y la Legislatura.

Los manifestantes denunciaron el aislamiento al que los tiene sometidos la Policía Metropolitana, sin baños químicos y con un encierro en donde "hay niños durmiendo bajo una lona desde hace varios días".

Los manifestantes, acompañados por organizaciones sociales y políticas, reclamaron "soluciones inmediatas" para las familias desalojadas que aún acampan en el boulevard de la avenida Fernández de la Cruz, frente al predio que se extiende entre la calle Pola y la avenida Escalada.

"Más de 100 familias marchamos hoy a la jefatura de Gobierno y a la Legislatura para que nos den una solución para los que se quedaron sin techo y acampan frente a las ruinas de sus hogares, pero en ninguno de los dos lugares nos abrieron la puerta", dijo a Télam Emanuel Ríos, uno de los delegados del barrio Papa Francisco.

"Hay chicos que están desde el sábado durmiendo abajo de una lona, queremos una solución habitacional como corresponde, tienen que cumplir con la ley 1.770 de urbanización de esos terrenos", enfatizó.

Ríos contó que "la Policía Metropolitana dejó encerrados a los que se quedaron frente al predio, pusieron vallas en las esquinas de Pola y Escalada y no se puede salir ni entrar, los demás estamos acampando enfrente para hacerles el aguante y cuando podemos les pasamos comida y agua".

"El gobierno puso también 'un cerco mediático' al barrio, los medios no pueden entrar para mostrar como nos tienen aislados, y tampoco dejan que entremos elementos de primera necesidad para quienes acampan. Tuvieron que hacer un pozo para una letrina en la plazoleta porque no dejaron pasar un baño químico", denunció.

El delegado vecinal aseguró que "los que aceptaron ir a los paradores nos cuentan que la están pasando muy mal, que no hay infraestructura, que los atienden con mala cara y los amedrentan para que acepten un subsidio para un alquiler por dos meses y se vayan, pero eso no es solución de nada".

"Aunque hoy no nos hayan atendido, nosotros vamos a seguir luchando porque son nuestras familias las que están pasando hambre y frío en la calle y porque hay una ley que dice que es nuestro derecho que esas tierras se urbanicen", concluyó.


COMENTARIOS