CULTURAL

La música tropical tuvo su noche de gala en la Usina del Arte

El evento significo un reconocimiento al genero más popular de la argentina, el verdaderamente representativo de la clase obrera.

La música tropical tuvo hoy su noche de gala en La Usina del Arte -espacio habitual de otras expresiones estéticas- con un espectáculo integral conformado por canciones, la entrega de galardones, citas a la historia del género, la presencia de los referentes y un tributo a la fallecida cantante Gilda.

Músicos de diferente linaje y recorrido, pero todos con una pertenencia clara a la música tropical, estuvieron presentes en la sala del barrio de la Boca: entre ellos, Antonio Ríos, Ariel Puchetta, Alcides, Daniel Agostini, Gladys, "La bomba tucumana", Sebastián, Miguel "Conejito" Alejandro, Daniel Cardozo, Adrian y Los Dados Negros, Pocho "La Pantera".

El evento significo un reconocimiento al genero más popular de la argentina, el verdaderamente representativo de la clase obrera. Desde los inicios con los Wawanco, pasando por otras etapas como la de la dictadura cuando fue profundamente discriminada y sumergida, la cumbia tuvo sus picos y bajas como lo fue durante los años 90 en el que la cumbia villera fue un una respuesta claramente contestataria al vaciamiento concretado por el menemismo.

La cumbia ha sido siempre el vehiculo de expresión de las clases obrera y de los sectores más carenciados, la válvula de escape, sus bailes fueron su único vehículo de la alegría y en algunos momentos denuncio la exclusión y la violencia institucional. "Es la primera vez que esta música, tantas veces relegada, tiene un reconocimiento desde los organismos oficiales. Así que sólo podemos estar agradecidos", dijo el chaqueño Antonio Ríos, uno de los artistas con más trayectoria.

"Somos portadores de alegría. Ese es el vehículo y el valor de esta música y no se la puede menospreciar", apuntó "La Bomba" Gladys. En un mismos sentido se pronunció el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, que enfatizó el valor de la música tropical. "Recibir música popular en la Usina es muy importante, sea jazz, tango, o música tropical", dijo.

El homenaje musical, en una ceremonia que fue conducida por Marcela Baños, se realizó en el Anfiteatro de la Usina del Arte, con sus gradas completas. "Son todos músicos que hicieron bailar y reír. Fue algo muy hermoso y no puedo más que acompañar", dijo El Polaco, uno de los cantantes de mayor convocatoria de este tiempo de la música tropical. "Para mi el más grande fue Rodrigo. Si lo tuviéramos con nosotros arrasaría con todos los premios", lanzó. El ex representante de Rodrigo, José Luis Gozalo, que tuvo a más de 70 artistas del género bajo su ala, afirmó "que era importante hacer un reconocimiento de esta manera a la música popular". "La música tropical va cambiando a medida que cambia nuestro ritmo de vida. Pero es un cambio para mejor. En este momento, sin embargo, está entrando mucha música de afuera, pero creo que es apenas un paréntesis en esta evolución".

Como broche de la gala, hubo un homenaje especial a la cantante Gilda, popular cantante y figura emblemática del género que falleció en un accidente de tránsito en 1996, en camino a Chajarí, Entre Ríos. "Fue una figura central. Recuerdo el drama de recibir la noticia el día del accidente, mientras íbamos a un show. Este es un reconocimiento que se necesitaba", aseguró Ariel Puchetta, ex músico de Ráfaga.

A la hora de analizar el género en la perspectiva histórica, Miguel "Conejito" Alejandro, que jalonó la música tropical desde los '80, apuntó que le tocó vivir "la época de profesionalización de esta música, que por suerte tiene ya un recorrido importante". "Me pone muy feliz que estemos todos juntos para este homenaje y para recordar a Gilda", apuntó.

El show, con una banda estable lo inicio uno de los especialistas de la cumbia romántica como Daniel Cardozo, lo siguió en el mismo Ritmo Daniel Agostini, ambos demostrando el colorida y la seriedad con la que la movida tropical se tomo este justo homenaje. La tucumana Gladys se despacho con uno de sus hits e hizo bailar a la gente, y la siguió el veterano Antonio Rios, con sus tradicionales sombreros, uno de los preferidos del ídolo boquense Juan Roman Riquelme.

El veterano Miguel Conejito Alejandro hizo saltar a todos los reunidos en la coqueta Usina y el cordobés Sebastián mantuvo la fiebre en alto, al igual que el exponente de la cumbia jujeña y norteña Adrián con sus Dados Negros. La cumbia moderna que mezcla pop, salsa y merengue tuvo su lugar de la mano de Ariel Puchetta, ex vocalista de Ráfaga, y ya todo era una fiesta, hasta que todos los próceres se reunieron en el escenario para cantar "No me arrepiento de este amor" hitazo de la fallecida Gilda, que le dio el merecido cierre al evento.

El homenaje fue organizado por la Subsecretaría de Coordinación y Promoción de Eventos, dependiente de Jefatura de Gabinete del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires.


COMENTARIOS